El alcalde César Mancillas Amador erró la nota y anunció la entrega de la primera etapa del tan cantado estadio de fútbol municipal en 6 meses, comentario que hubiera pasado desapercibido si no coincidiera con las elecciones estatales en Baja California.
La maqueta que esboza el sueño de Mancillas Amador, y que pregonaba en falsete desde sus días como candidato a la Presidencia Municipal de Ensenada por el Partido Acción Nacional (PAN), se presentó este jueves en el lobby del Ayuntamiento e incluyó un video tridimensional que abarcó desde los palcos hasta los baños del estadio mancillista.
Como defensas del proyecto, se acomodaron al final de la cancha municipal los ejecutivos de Casas G(f)eo ("Te aplasta la vida"), quienes respaldarán la construcción de la principal obra de la gestión del cantalde peregrino.
La presencia de los urbanizadores genera desconfianza en el proyecto: se sabe que las casas que construyen son de mala calidad y para muestra basta recordar el fallecimiento de un niño de seis años, a quien le cayó un pilar de una puerta de entrada en el fraccionamiento Lomas de la Presa, orgullo empresarial y estafa pública y notoria, mientras jugaba con algunos vecinos del lugar.
La víctima, que en los archivos de Chafas Geo del puerto de Ensenada será recordado como Eduardo (N), estaba de visita en una de las malviviendas; salió a jugar y se colgó, pero la estructura se colapsó y aplastó su cuerpo contra el pavimento (El Vigía 2006-02-08).
A simple vista se constató que el pilar estaba apenas soportada con delgadas varillas; cuando los medios de comunicación acudieron las maquinarias estaban recogiendo los pedazos de concreto.
Los empresarios mandaron al más joven de sus ingenieros; este, casi llorando, suplicó que el hecho no se difundiera en la prensa.
Más tarde enviarían un comunicado lamentando el suceso. La noticia se difundió a nivel regional esa misma noche, pero en Televisa se abstuvieron de mencionar el nombre de Casas Geo. La historia se perdería en las páginas interiores de los diarios y hasta se documentó que la Procuraduría General de Justicia (PGJE) supuestamente había atrapado a los responsables.
¿Algún ingeniero, algún arquitecto acaso? No, se habló y satanizó a la clase trabajadora a la que recurren los ejecutivos de las constructoras para limpiar sus porquerías: los albañiles.
Estos oscuros hombres de negocios, que hacen palidecer los cartones de Naranjo, se presentaro este jueves y lanzaron su discurso aplanador de desarrollo.
En un reflejo de poca importancia por la zona, uno de ellos agradeció a las autoridades de Tijuana (en vez de Ensenada) cuando tomó el micrófono. Los reunidos lo abuchearon.
El único invitado bien visto y con resultados probados a nivel mundial, fue el técnico de la selección sub 20: Chucho Ramírez, de quien se sabe al parecer le fastidian un poco los protocolos mediáticos
El experto en karaokes de los bares y carioquis con los medios, Mancillas Amador, tomó el micrófono y entonó su balada de progreso local; a media rola erró la estrofa y cantó que estaría entregada la primera fase en 6 meses.
Haciendo cuentas, las elecciones para elegir gobernador, presidentes municipales y diputados locales serán el próximo 5 de agosto (esto gracias a que los magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación -SCJN- le dieron palo al proyecto de reforma electoral de los panistas, je, loosers), fecha en que coincide con el corte de listón del mentado estadio que al parecer pretende reunir a 20 mil fanáticos del balonpié.
En un arriesgado cover de Maná, el cantalde entonó la frase "me vale gorro" para explicar su postura ante las posibles crítica de los demás partidos políticos; cuando contó los meses restantes (oh sí, sabe contar) dudó un poco, pero al final hasta declaró que podría presentarlo un mes antes.
Según algunos reporteros, los trajeados de Casas Feo se sacaron de onda, pero eso es algo que no se verá en los noticieros.
viernes, 12 de enero de 2007
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